Santander pone a su disposición la gestión más eficaz de los riesgos de cambio para maximizar sus beneficios. Le proponemos la forma más sencilla, cómoda y rápida de gestionar su riesgo de cambio que le permitirá reducir las posibles fluctuaciones de cambio de las diferentes divisas.
Santander le proporciona todos los instrumentos necesarios para fijar cambios a una fecha futura; para ampliar información pulse en cada una de las siguientes opciones.
Es la estructura organizativa a través del cual se compran y se venden las diferentes monedas nacionales. Principalmente operan bancos o intermediarios financieros, bancos centrales de cada país, brokers y empresas.
Cualquier medio de pago (cheque, transferencia, etc.) cifrado en una moneda que no sea la nacional. También se engloban en el concepto de divisa los billetes de banco extranjeros.
Las divisas fluctúan constantemente debido a una serie de factores como son:
En el mercado de cambios se distinguen dos segmentos básicos, en función del tiempo que media entre la contratación y la liquidación y que configuran dos grupos específicos de operaciones y dos precios o tipos de cambio diferenciados:
Es una operación de compra o venta de divisas a plazo, mediante la cual se elimina la incertidumbre que surge en cualquier pago o cobro futuro que se tenga que realizar en moneda distinta de la divisa local.
Por tanto, se trata de un contrato que firman una entidad financiera y un exportador/importador, en virtud del cual se crea un vínculo con dos obligaciones principales:
Ponemos como ejemplo el caso de una exportación.
Cuando exportador y Banco realizan un seguro de cambio, éste último fija una cotización de divisa contra el euro a una fecha determinada.
Así, si el dólar USA cotiza contado a 1,25 (1 € = 1,25 $), y el exportador realiza un Seguro de Cambio por tres meses (tiempo que tardará en cobrar en la misma divisa), el Banco fijará el seguro, por ejemplo, en 1,247.
En consecuencia, el exportador ya sabe que suceda lo que suceda dentro de 90 días, el Banco se ha comprometido a comprarle los dólares USA a 1,247 y:
A través de un sencillo ejemplo (exportador español), podemos ver los pasos teóricos que sigue el Banco. Suponemos los siguientes datos de partida:
Cantidad asegurada: 100.000 dólares USA (importe de la exportación a cobrar a 90 días)
Libor del dólar USA: 2%
Euribor: 3%
Cambio contado (spot) del dólar USA: 1,25 (1€=1,25$)
Los pasos teóricos que daría el Banco para calcular el Seguro de Cambio son:
Siguiendo con el mismo ejemplo, el cálculo matemático es el siguiente:
Al Banco asegurador le ha costado el 2% los dólares USA que ha pedido prestados.
Por otra parte, ese mismo Banco asegurador ha percibido el 3% (Euribor) por situar los Euros en el Interbancario.
El resultado es que el Banco ha obtenido una diferencia de intereses del 1% que traspasa al exportador en la cotización a plazo.
Luego;
Seguro de Cambio = 1,250 (cambio contado) - 0,003 = 1,247
De aquí se desprende que:
Eliminación del riesgo de cambio, por lo que se fijan los resultados futuros en las transacciones en divisas, cuando exista un aplazamiento del pago o cobro.
No existe ningún desembolso inicial ya que se paga o liquida al vencimiento.
Para que Santander pueda ofrecer un precio ajustado al mercado, el cliente nos deberá informar de las fechas y los importes estimados, LO MAS AJUSTADO A LA REALIDAD, en los que se utilizará el Seguro de Cambio Abierto.
Es un contrato que conlleva el derecho, (no la obligación) a comprar (Call Option) o vender (Put Option) a una cantidad determinada de una moneda por otra diferente, a un tipo de cambio prefijado (Precio de Ejercicio) durante un periodo de tiempo estipulado. A cambio de este derecho, el Comprador de la Opción (Cliente) tiene que pagar al Vendedor (Banco) una Prima.
La diferencia básica entre el Seguro de Cambio y la Opción es que en el primero se contrae una obligación de cumplimiento y, en la segunda, un derecho, pero no una obligación.
El Comprador (Cliente)
Adquiere el derecho (no la obligación), a comprar o vender la divisa. Sus resultados son: Pérdida limitada por el precio de la Prima o Posibilidad de obtener beneficios ilimitados
El Vendedor (Banco)
Asume la obligación de cumplir el contrato cuando la Opción se ejercite.
La Prima de la Opción
Es el precio del contrato, la contraprestación que pagará el Comprador (Cliente) y que recibirá el Vendedor (Banco).
El Precio de Ejercicio
Es el precio o tipo de cambio al que, en caso de ser mejor que el precio de contado, tendrá derecho el Comprador (Cliente) de la Opción a efectuar la compra o la venta de la divisa.
El propio exportador o importador, es decir, el Comprador de la Opción, es quien negocia y fija el precio (Precio de Ejercicio) al que quiere adquirir o vender determinada divisa en un día concreto. Este tipo de cambio también se denomina strike price.
En función del cambio fijado, el Comprador tiene que pagar una Prima al banco Vendedor. Esta Prima se paga en el momento de la adquisición y también recibe el nombre de premium.
Así otra diferencia básica con el Seguro de Cambio es que en éste no se paga nada (salvo la comisión bancaria) y en la Opción se paga una Prima.
Al pagar una Prima por parte del Comprador, el coste definitivo de una Opción es:
Al llegar el vencimiento de la Opción su Comprador (Cliente) determinará si le interesará o no ejercitarla. Supongamos, por ejemplo, un exportador que va a recibir 100.000 dólares USA dentro de 3 meses. El dólar al contado está a 1,250 y el Seguro de Cambio cotiza a 1,247. Sin embargo, el exportador quiere cambiarlos a 1,230.
Adquirirá una Opción de Venta (Put Option) a 1,230. El Banco Vendedor le cobra una Prima, por ejemplo 0,017 $ por cada dólar USA. Llegado el día del vencimiento de la Opción (3 meses después) el mercado de contado da una cotización del dólar USA a 1,260. Obviamente ejercerá su derecho vendiendo los dólares USA al Banco a 1,230.
Precio de Ejercicio 1,230 + 0,017 $ de Prima = 1,247 dólar USA por cada Euro. Si compara este resultado le sale igual que si hubiera realizado al principio un Seguro de Cambio a 1,247.
Podría haber sucedido que en el momento del vencimiento el dólar USA estuviera, por ejemplo, a 1,200. No ejercería la Opción y los vendería en el mercado a 1,200.
Cuando el ejercicio o no de la Opción sólo se puede realizar el día del vencimiento, estaremos hablando de una Opción Europea.
También existe la Opción Americana, que es aquella que se puede ejercer en cualquier momento durante su vigencia, es decir, desde su adquisición hasta el vencimiento.
Se monta a partir de una Opción de Compra y una Opción de Venta simultáneas del mismo importe e igual vencimiento, de manera que las primas se cancelan. Se crea así un túnel de cotizaciones asegurándose el tipo de cambio en torno a unos valores fijados de los precios de ejercicio, y queda limitada la posibilidad tanto de ganar como de perder.
Además de los Seguros de Cambio y de las Opciones en Divisas, Santander ofrece la posibilidad de utilizar Otros Derivados de Tipo de Cambio para reducir/eliminar el riesgo de cambio en las operaciones de Comercio Exterior.
Entre otros, podemos enumerar:
Los dos componentes fundamentales de una operación de compraventa, sea ésta nacional o internacional, son la entrega de la mercancía y su cobro. Este último es, sin duda, el más decisivo para un exportador. Es obvio, por otra parte, que cualquier incidencia relacionada con el cobro de las mercancías vendidas será de más difícil resolución en las operaciones de comercio exterior que en las interiores. Interesa al exportador, por tanto, conseguir la mayor seguridad en la obtención del importe de la venta. Esa mayor seguridad en los cobros derivados de operaciones comerciales internacionales puede alcanzarse por diversos caminos; los cobros anticipados, los medios de cobro documentarios o las garantías bancarias, son algunos de ellos. Otra de estas vías es lo que se denomina el "seguro de crédito", es decir, la obtención por el exportador de una garantía, a través de una compañía de seguros, de que si no cobra el importe de la venta, dicha compañía le indemnizará por el “siniestro” que supone el impago. El seguro de crédito para operaciones internas tiene una filosofía similar.
Contrato de seguro que permite al exportador cubrirse frente al riesgo de impago, así como a otros riesgos asociados al proceso de venta al exterior. A cambio de una prima, la compañía de seguros se compromete a indemnizar al exportador frente al “siniestro” que implica el siniestro, así como a otros riesgos relacionados con la exportación.
El riesgo más importante que se suele cubrir con un seguro de crédito es el de impago del comprador, que es el denominado específicamente como Riesgo de crédito, es decir, aquel que existe desde el momento en que se envía la mercancía hasta que se cobra.
El otro importante riesgo susceptible de cubrir es el derivado de que al fabricante le hagan un pedido y luego se lo cancelen. Este riesgo es particularmente importante en los productos que se fabrican exclusivamente bajo pedido, como muchos bienes de equipo y de capital (maquinaria, barcos, etc.). Esta contingencia es la que se denomina Riesgo de resolución de contrato, es decir, el existente desde el momento de la firma del contrato hasta la expedición de la mercancía.
Igualmente, puede ser cubierto el denominado Riesgo de no retirada de mercancía, es decir, aquel derivado de que el comprador, incumpliendo el contrato de compraventa, no se haga cargo de la mercancía en el punto y momento acordado, y tenga que ser recuperada por el exportador.
Pero existe otra importante clasificación de riesgos, que se superpone a la anterior, en función del motivo que genera el impago. Así estaríamos ante:
Esta es la clasificación de los tipos de riesgo más importantes a considerar en una operación comercial, desde el punto de vista del exportador.
Las compañías de seguro de crédito a la exportación (especializadas o generalistas) proporcionan este tipo de cobertura:
Grado de cobertura para el exportador: Las pólizas de seguro de crédito a la exportación no cubren el 100% del valor de la exportación. Existe siempre un porcentaje del valor total sin asegurar (entorno al 20%)
Plazo d la Indemnización: El exportador no recibe inmediatamente la indemnización de la incidencia producida.
Coste del seguro: El coste del seguro depende siempre de la valoración del riesgo la operativa que haga la compañía de seguro. Se consideran aspectos como valor total a exportar, tipología de clientes, sector de la empresa, países destino de la exportación, plazos de cobro, medios de cobro, cuantía media de la operación, historial de impagos… a la hora de valorar la prima.
Países para los que se utiliza en mayor medida el seguro de crédito a corto plazo: Se utiliza mucho más para operaciones con países desarrollados que en para los nos desarrollados, motivado por que en los primeros los compradores tienden a evitar los medios de cobro/pago más seguros (por su mayor coste y menor agilidad) y el exportador ha de buscar sistemas alternativos de cobertura de riesgo de impago. Por otra parte, la mayor información empresarial disponible y el nivel superior de seguridad jurídica favorecen asimismo su uso en países desarrollados.